¿Te atreves a dar el sí quiero con un vestido lencero o con un conjunto satinado? El satén se ha convertido en uno de los tejidos favoritos tanto de novias como de los diseñadores.
Tiene un punto sexy que evoca a una novia de lo más cañera, así como dulce. Ya nadie se resiste a esta tendencia y como hemos ido viendo en las pasarelas, parece que viene para quedarse. Lo cierto es que nunca se fue. Si echamos la vista atrás, Gwyneth Paltrow o Kate Moss ya lucían este tipo de vestidos en la década de los noventa.
La gente tiene ganas de celebrar después de dos años duros y con la mayoría de los eventos cancelados a causa de la pandemia.
Todo esto lo dejamos atrás, los eventos ya están en pleno auge y con la llegada del buen tiempo, muchas son las novias que deciden optar por vestidos más ligeros, que no les hagan pasar un ápice de calor y con el que se sientan cómodas tanto en la ceremonia como después en el momento más desenfadado de la celebración.
Por eso, elegir una tela satinada te va a convertir en la novia que siempre deseaste ser. Lucirás al máximo tu silueta y su versatilidad hará que puedas adaptarlo, incluso, usarlo en futuras ocasiones. ¿Te imaginas poder reutilizar tu vestido o traje de novia? No puede gustarnos más la idea.
Firmas como Gucci, Rodarte, o Marques’Almeida ya se han unido a esta tendencia y es que hasta las actrices y celebrities más famosas se animan con ello también. En el sector nupcial podemos encontrar firmas como Grace Loves Lace, Jesus Peiro, Cristina Tamborero, entre otras que también apuestan por el satén.
Sin embargo, si el vestido lencero no consigue convencerte o crees que no va a ser del todo apropiado cuentas con la gran suerte de tener un montón de opciones más en el mercado y es que como bien decíamos, el satén va a sacar la mejor versión de ti.
Por eso, si lo tuyo no es lucir un vestido de tirantes o marcar silueta, puedes hacerte con un conjunto de chaqueta – pantalón o falda – y casarte igual de radiante que si lo hicieras con un vestido. La elegancia no está reñida con la comodidad y ya sabemos que todo es cuestión de actitud.
Lo cierto es que ya nadie se resiste, así que prueba y date la oportunidad de vestir el satén como nunca. Dale el protagonismo que merece y lúcelo sabiendo, además, que vas a ser el centro de todas y cada una de las miradas de tus invitados.
