La Aromafitoterapia, origen de los tratamientos Clarins Aroma, combina la aromaterapia y la fitoterapia, el poder olfativo y estimulante de los aceites esenciales con las propiedades beneficiosas de los extractos de plantas.
En 1954 Jacques Courtin-Clarins formuló los aceites 100% extractos de plantas para el rostro y el cuerpo. Nace así la gama Aroma.
En 2023, los Laboratorios Clarins, reformulan los Baños Aroma para que la ducha o el baño sean un momento de bienestar para la piel.
Las fórmulas de Bain aux Plantes “Tonic” y Bain aux Plantes Relaxant contienen un 96% de ingredientes de origen natural, entre ellos, nuevos agentes espumantes bío tan eficaces y sensoriales como los de la generación precedente. Al contacto con el agua, se transforman en una ligera espuma delicada, apta para todos los tipos de pieles, incluso las frágiles y sensibles.
En sus envases, 100% reciclables, se ha reducido en un 28% la cantidad de plástico empleada en la fabricación del tapón
En 1987, los Laboratorios Clarins innovan combinando el perfume y las propiedades de los aceites esenciales en un mismo frasco y crean la primera Agua de Tratamiento: Eau Dynamisante, a la vez perfume tonificante y acción tratante, esencial para el bienestar y el confort de la piel. A esta se le sumarán posteriormente nuevas variantes olfativas y tratamientos para el cuerpo. 4 Aguas de Tratamiento y 4 emociones: energía, alegría, serenidad y fuerza interior.
En 2023, redescubre las Aguas de Tratamiento Clarins con sus nuevos rituales de tratamientos perfumados hidratantes y para la ducha. Nuevas fórmulas, nueva sensorialidad y nuevos envases para perfumarse y sentirse bien.
Las Aguas han sido reformuladas con alcohol de remolacha 100% bio. La remolacha se cultiva en Francia según los principios de la agricultura biológica. La elección de este nuevo alcohol, más amigable con el medioambiente, forma parte de la filosofía responsable de Clarins. En tanto empresa pionera en la utilización de alcohol bio en sus fórmulas, Clarins respalda el cultivo agroforestal de remolacha francesa financiando estudios de suelos y la siembra de árboles. Desde 2016, se han cultivado 98 hectáreas de remolacha bio y se han sembrado 6.700 árboles.