A ntiguamente las perlas en las bodas eran sinónimo de mal augurio, representaban lágrimas y tristeza para la novia en su nueva etapa como casada. Y era por eso que una novia nunca debía usar perlas el día de su boda. En la actualidad la integración de la perla en la moda nupcial ha cambiado totalmente.
¿Cómo llevarlas?
Las novias más modernas utilizan la perla en joyas de carácter más vanguardista, mientras que las clásicas apuestan por los collares, pendientes, pulseras e incluso broches. Estos últimos imitan a piezas de generaciones pasadas o son de origen vintage. En todos estos diseños la perla suele ser un elemento clave combinado con diamantes y oro blanco.
La sofisticada tendencia está presente en el catálogo de firmas como Suarez, Rabat, Cartier, Majorica o Coolook (que prefiere el nácar a la perla tradicional)
Esta piedra preciosa la podemos encontrar en un sinfín de accesorios para la boda.
- Pendientes de perlas: Este complemento puede parecer clásico y poco original para tu día especial, pero puedes combinar las perlas con un toque de oro o diamantes. Pendientes alargados, en forma de lágrima, con motivos florales o con diseño geométrico.
- Colgantes: Los colgantes de perlas, colgantes XL, perfectos para un escote especial.
- O incluso anillos de compromiso con un toque diferente.
Ahora ya lo sabes, las perlas han dejado atrás su mala fama y pueden ser un complemento fantástico el día de tu boda. Si lo que quieres es dar una imagen sofisticada y coquette atrévete a ponerle un toque de perlas a tus looks. Es importante no usar demasiadas piedras preciosas para no caer en la ostentosidad.