La alta costura del traje de novio ha llevado la elección de los trajes de novio a otro nivel, con la exclusividad de la sastrería que ofrece una calidad excepcional, un diseño exclusivo y una cuidada atención al detalle.
La exclusividad de la sastrería a través del tiempo
La evolución y la excelencia han llevado la sastrería a niveles insuperables de calidad y estilos. Estos trajes no sólo son prendas de vestir, sino también auténticas obras de arte que reflejan la elegancia y personalidad del hombre que los luce en un día tan significativo.
Historia de la sastrería
La historia detrás del traje de alta costura es una parte admirable de la moda masculina. Uno de los primeros nombres que marcó la moda masculina fue Beau Brummell, una figura icónica del siglo XVIII en Inglaterra y a quien podemos considerar el primer “influencer” del mundo. Su estilo realmente influyó en la sociedad de la época e incluso sirvió de referencia para los trajes que vemos hoy en día.
La primera gran evolución en la sastrería masculina llegó en la década de 1840, con la introducción de los abrigos largos. Se trataba de un abrigo negro, similar a los actuales, con un largo por debajo de la rodilla y una abertura en la espalda.
Primera Guerra Mundial
Durante de la Primera Guerra Mundial, la vestimenta masculina sufrió una fuerte influencia militar. Ahora los pantalones tenían cintura alta y las chaquetas estaban diseñadas para ensanchar los hombros y alargar las piernas.
Por otro lado, encontramos la década de 1920, conocida como la Era del Jazz, que influyó en la moda masculina con la introducción de materiales más llamativos, colores brillantes y patrones atrevidos. Fue la época en la que se empezaron a ver pañuelos de bolsillo y camisas con pins en el cuello, siguiendo el estilo de Jay Gatsby.
Con un estilo de tejido más ligero, refinado y fluido en la década de 1930, este look pasó a asociarse con una imagen masculina heroica en el cine. Esta época fue considerada la época dorada de la moda masculina clásica, debido a la elegancia y distinción de sus trajes.
Segunda Guerra Mundial
Con la Segunda Guerra Mundial se crearon trajes minimalistas. Los chalecos quedaron a un lado y el traje de franela gris pasó a ser la opción diaria.
En los años 50 surgió el estilo “Ivy League”, que se caracterizaba por abrigos en forma de saco, con abertura central y pantalones plisados. A finales de la década se hizo muy popular el estilo “Mod”, compuesto por trajes ajustados, solapas y corbatas estrechas y pantalones de corte recto y sin pliegues.
Fue en los años 80 cuando se produjo una revolución en la moda con el concepto del “poder del traje” idealizado por Giorgio Armani. Estos trajes masculinos, considerados símbolo de poder, se caracterizaban por abrigos con hombros anchos y solapas anchas que creaban una silueta muy definida.
La exclusividad de la sastrería en los 2000
A principios de la década de 2000 se empezaron a producir trajes más ajustados, con pantalones más cortos y chaquetas con solapas más estrechas. El color negro empezó a verse como la opción más popular.
Lo cierto es que con el paso de los años van surgiendo nuevas tendencias. Sin embargo, la mayoría de los trajes siguieron siendo ajustados. Por lo tanto, algunos diseñadores reintrodujeron chaquetas más cortas, que ahora llegaban hasta la cintura para dar un aspecto más moderno y relajado.
Actualmente, la moda para el novio es explorada por varias marcas, que ofrecen en sus colecciones trajes de graduación para todos los gustos y estilos, en diferentes estampados y colores, pero siempre marcados por la calidad de los tejidos, el corte y la confección. Tenemos lo mejor de la alta costura al servicio de los novios para que todos puedan destacar y convertirse en una figura de protagonismo y elegancia el día de su boda.
