Cada mujer es un mundo: un carácter, unas virtudes, sueños, ilusiones, miedos y gustos. El día de tu boda, uno de los más importantes de tu vida, todos estos aspectos se unen para formar a la novia que llevas dentro y te preparan para el «sí, quiero» con quien será tu compañero de viaje a partir de ese momento. La forma de reflejar tu personalidad en el look de novia es prestando atención a cada detalle, entre ellos el peinado. Te mostramos cuatro ideas que hemos visto sobre la pasarela para las colecciones primavera-verano 2017 y que nos han encantado.
El pelo suelto sin esconder la cara
¿Cómo llevar el pelo suelto sin esconder la cara? Recógete los mechones delanteros con una pinza dejando al descubierto las orejas y asegurándote de que tu rostro siempre queda al descubierto. Puedes optar por usar una que se esconda bajo el pelo o bien por una más llamativa que cuente, por ejemplo, con algún elemento floral.
Desfile de Brock Collection
La trenza es la comodidad por excelencia
La trenza es la comodidad por excelencia. Se trata de un peinado de novia que refleja pura elegancia y que te permite, a la vez, olvidarte durante horas del pelo. Puedes bailar todo lo que te apetezca, tu recogido seguirá ahí. ¿Qué opciones tienes? Una trenza clásica que, si te apeteceiera darle un toque distinto, podrías fijar con una goma original, o algo más atrevido, como varias trenzas finas que desprendan un aire más cañero y juvenil.
Desfiles de Felipe Varela y de Ailanto
¿Eres de las que salen de casa tal cual y no te apetece cambiar de look el día de tu boda? No hay problema. Te proponemos que te hagas la raya del pelo en medio, pues marcará las facciones de tu rostro. Estarás cien por cien natural y guapísima. Si tienes flequillo, pártelo por la mitad y échalo hacia los lados.
Desfile de Erin Fetherston
El moño: el peinado nupcial al que muchas novias recurren
El peinado nupcial al que muchas novias recurren es el moño, y no es de extrañar. Hay infinitas formas de llevarlo, pero nos han llamado la atención estas dos. Alto, sin raya, con todo el pelo hacia atrás y con unas trencitas en la parte trasera de la cabeza que lo distinguen del moño de toda la vida. Aunque un poco serio, este recogido nos ha conquistado. Para una novia más desenfadada proponemos uno no tan alto, con algunos mechones sueltos delante y detrás, como si estuviera mal hecho, pero cuidando en realidad cada detalle.
Desfiles de Dior y de Tadashi Shoji